Última del ciclo de tres dentro del proyecto: “La Jubilación Activa, a través del Voluntariado” de Secot-Álava.
El conocidísimo economista Ignacio Marco-Gardoqui, acompañado por los socios de Secot, Nely Sagredo y Javier Fernández de Troconiz, nos ofrecieron su visión sobre algunos de los aspectos económicos y sociales que acompañan el tránsito a la jubilación en general y en este momento de la coyuntura en particular.
Edurne Baz Uriarte moderó la sesión con su habitual bien hacer. Comenzó Víctor Allende , presidente de Secot, recordando el ciclo de tres conferencias sobre temas ligados al momento de la jubilación. Secot, con este proyecto, trata de ayudar a los trabajadores que están en ese periodo de adaptación a la nueva etapa de vida que se abre con la jubilación. En la primera fase se contactó con los futuros jubilados en sus centros de trabajo; este ciclo de conferencias, de la mano de reconocidos expertos ha tratado de ofrecer ideas y pautas en temas relacionados con la Salud, Nutrición, Ejercicio Físico/Deporte, Psicología y relaciones; y, finalmente Economía.
Queda por completar la tercera fase, consistente en jornadas de puertas abiertas con las organizaciones que trabajan en base a voluntarios y que ofrecen la posibilidad de integrar a aquellos que quieran conocer este mundo y dedicar una parte de su tiempo. Eso permitirá mantener una actividad gratificante y seguir aportando a la sociedad desde un plano diferente al de la época laboral. Agradeció también a los diferentes agentes que ha hecho posible el éxito registrado hasta hoy.
Edurne moderó el coloquio, en el que Ignacio nos dejó interesantes mensajes, algunos de ellos atrevidos, en el sentido de que, por impopulares, no son muy comentados en el lenguaje de políticos y otros líderes sociales. Algunos de ellos:
IMG: La jubilación, si la salud lo permite, puede ser la mejor época de la vida, liberados de las “obligaciones” laborales que nos limitan la libertad de disponer de nuestro tiempo.
Una de sus frases: “no te paras porque te has hecho viejo, te haces viejo porque te paras” invitaba a mantenerse activo en la nueva etapa. Nos ofreció su personal organización del tiempo, dividida en tres tercios, uno para lo que podría ser el mantenimiento de una actividad de tipo laboral. Incluida su faceta de escritor de artículos de opinión económica y política, confesando que es más una afición que una obligación.
IMG: Hay que hacer cosas que diviertan. Otro tercio lo dedico a actividad de ayuda social, en una residencia con 167 residentes y un comedor para 250 personas. También cooperando con la Universidad de Deusto donde fui docente. El tercio que falta lo dedico a la vida familiar, nietos, deporte, viajes, etc.
NS: ¿Cuál es, Ignacio, tu visión sobre el marco económico actual? La economía muestra signos de ralentización y parece que todos los esfuerzos por incentivarla, a base de inyectar dinero al sistema, pueden estar cercanos al fin, sin que se hayan conseguido los objetivos previstos. Puede ocurrir que hayamos agotado nuestro arsenal sin haber conseguido derrotar al enemigo, en este caso ¿nos acercamos a un estancamiento, considerable en el tiempo, del crecimiento económico?
IMG: Es cierto que hay nubarrones en el horizonte económico, pero de momento la situación no es mala, no es tan prometedora como hace unos años, en ese sentido las perspectivas son menos buenas, pero la situación no es mala, especialmente para nuestro país. La guerra comercial latente a nivel internacional, personalizada entre USA y China, es una mala noticia, no puede traer más que malas consecuencias.
En Europa no entendemos el Brexit, es un sinsentido, también hay países en situaciones muy problemáticas, por ejemplo, Italia; Alemania, un ejemplo de buen hacer económico, esta sin crecer; sin embargo, la situación es razonablemente buena para España. Las “inyecciones” de dinero en Europa han sido buenas para la economía productiva, para el consumo duradero y para los estados, super endeudados. Sin embargo, es malo para los que tienen ahorros.
JFT: La longevidad, el alargamiento de la vida, es un hecho relativamente nuevo que va a condicionar la etapa de la jubilación. Los jubilados aparecen como consumidores, lo que está haciendo que haya nuevas profesiones, puestos de trabajo y oportunidades para empresas. No sólo como consumidores de servicios de salud; también en otros planos. Pero la visión social es negativa, hasta catastrofista, como si ese alargamiento de la vida iría a ser una carga para la sociedad. No acertamos a ver lo positivo de la nueva situación y las oportunidades de desarrollo económico que genera y generará.
También los jubilados tenemos que hacer un esfuerzo para, desde el nuevo estatus, aportar a la sociedad, aunque algunas de las aportaciones no computen directamente en el PIB, Producto Interior Bruto, pero que pueden aportar a otro índice (inexistente), el FIB, Felicidad Interior Bruta; y no sólo ayudando en la “logística de los nietos”, también a la sociedad en general, no olvidemos que, con este proyecto, desde Secot, pretendemos desarrollar el mundo del voluntariado.
NS: Cuando nos jubilamos tenemos, en bastantes casos, un patrimonio, pueden ser un Plan de Pensiones, unos fondos en un banco, también un patrimonio inmobiliario, el 91% de las familias es propietaria de su piso y la hipoteca estará seguramente pagada. ¿Qué opciones de inversión son buenas en estos momentos? ¿es posible utilizar el patrimonio inmobiliario, la casa propia, para utilizarla, en caso necesario, para complementar las pensiones?
IMG: Puedo reproducir los consejos de un famoso gurú de la inversión, válidos para cualquier etapa de la vida:
– Evita deudas innecesarias
– Trata de vivir austeramente
– No inviertas en algo que no comprendas
– Invierte siempre a largo plazo
– A la hora de invertir, el pesimismo es tu amigo y la euforia tu enemigo
– No es posible hacer un buen negocio con una mala persona
No se puede dar recetas generales, cada persona es un caso y hay que conocerlo y analizarlo, incluso su índice de “aversión al riesgo”, si alguien sufre porque su inversión oscila arriba y abajo, mejor que invierta en sistemas estables, que ciertamente tendrán menos rentabilidad, pero darán menos disgustos en el corto plazo.
Edurne Baz: ¿y las pensiones? Es un tema que esta en la calle y del que recibimos noticias entre malas y peores.
IMG: Ningún miedo. Las pensiones públicas NO van a desaparecer NUNCA, tampoco creo que vayan a bajar para los actuales pensionistas, quizás no esté tan claro que todas las pensiones vayan a mantener el poder adquisitivo. Pero el sistema tiene grandes problemas de sostenibilidad, en el año 2018 el déficit fue de 32.000 Millones de Euros y se arrastra una deuda de 100.000 millones. Muchos factores se han puesto en contra:
– El alargamiento de la vida
– La anticipación de la edad de jubilación, inferior a los 65 años y unos meses, la teórica en este momento.
– La poca entrada de nuevos cotizantes y sus bajos salarios
Ante esta situación hay que achacar a los políticos que no hayan sido capaces de ofrecer soluciones, sólo algunos parches totalmente insuficientes. El Pacto de Toledo, que tenía, y tiene, la responsabilidad de analizar la situación y tomar medidas consensuadas, no hace los deberes. En él están representados todos los partidos políticos. Ni siquiera hay una información veraz sobre la situación, se transmiten falsedades, que calan negativamente en la opinión de algunas personas.
En España, por lo general, las pensiones de jubilación no son bajas, son, en términos relativos, más altas que en Alemania y otros países de nuestro entorno. La Tasa de Sustitución, la que indica la variación entre el último salario y la pensión es alta, alrededor del 70%.
El alargamiento de la vida nos va a lleva a vivir 100 años, y más. Como las pensiones no se pueden, ni se deben, ni se van a reducir la única y más justa solución es ampliar la edad de jubilación, por ejemplo, a los 70 años, y tendrá que ir subiendo. La división de la vida en tres etapas, la de estudios, la laboral y la de jubilación, se va a ir diluyendo, será necesario estudiar y trabajar, incluso dejar de trabajar para reciclarse. Seguramente la jubilación tendrá que ser gradual, dejando los trabajos, o parte de ellos, que requieran un considerable esfuerzo físico, para hacer otros donde se pueda aplicar los conocimientos y capacidades de la persona. La flexibilidad será una de las claves en este nuevo marco. Los mayores tienen muchas cosas que aportar, no sobra nadie. Se deberán generar nuevos tipos de trabajos, que no somos capaces de visualizar ahora; la aportación de emprendedores es crucial para el desarrollo del empleo. Para eso la imagen del emprendedor y del empresario debiera mejorar.
Hace una mención a Amancio Ortega y su indudable aportación social, a través de impuestos, donaciones y, sobre todo, a través de la propia creación de empleos.
«La gente no puede estudiar lo que quiera, por lo menos debe saber las consecuencias de sus decisiones en este punto».
La universidad no puede ser una fábrica de parados, habiendo empleos en otros campos. Hay que combinar lo que se quiere estudiar con lo que el mercado demanda.
El animado turno de preguntas terminó por aclarar algunas de las cuestiones planteadas. Como manifestaron algunos de los asistentes, 180 en total, la sesión había aclarado, de forma sencilla, algunos de los puntos que tanta controversia generan hoy en día, en muchas ocasiones por falta de una sólida base de informaciones.