Un artículo de M.ª Consuelo Vázquez Ruiz de Larrea,
senior de SECOT – Álava
Publicado en: www.geriatricarea.com
La vejez es una nueva etapa de la vida, un nuevo tiempo para vivir de forma diferente. Hay que prepararse para envejecer bien, adaptarse, ajustarse de forma adecuada a nuevos cambios y hábitos a realizar. Diversificar las actividades antes de la vejez, romper con la rutina, ser activo, abierto a los demás para lograr una vida plena con sentido. Envejecer es un regalo que se ha de vivir con pasión, disfrute y motivación.
Tendremos un proyecto de vida “rico” cuando desarrollamos recursos relacionados con el interés por los demás, cuando somos curiosos, cuando tengamos relaciones e ilusiones, cuando elijamos buenas distracciones. El ocio valioso tiene una gran importancia en nuestra evolución y en la calidad y bienestar de vida.
Se debe tener una actitud positiva ante la vida, empoderarse al fin, estar dispuesto a aprender, a sentirse útil, a hacer algo que me gusta, a autorrealizarme. Está en nuestra mano desarrollar emociones positivas, e intentar mantener un funcionamiento físico, cognitivo, y social adecuado, que contribuyan a dar significado a cada día.
Nuestra vida hay que guiarla de forma satisfactoria, ayuda mucho el apoyo social y familiar, tener una red sólida de apoyo afectivo.
Es imprescindible realizar rutinas, planes, proyectos, objetivos; hacer una o varias actividades diarias. Activarse. No parar. No estancarse. No estar sentado. No abusar demasiado de la tele
No hay recetas generales para todos. Debemos potenciar las aficiones y las habilidades personales y fomentar la resiliencia que supone una alternativa a las dificultades.
El estilo de vida personal vivido con anterioridad, va a condicionar y configurar el proceso de desarrollo adecuado que se va a tener en esta última etapa.
Evitar posturas negativas: el estrés emocional, los traumas, la depresión, el aislamiento, la pérdida de autoestima, el desengancharse, el no querer vivir.
Cada persona es una unidad global integrada e interconexionada por las tres áreas del desarrollo humano, lo que se denomina con el término biopsicosocial.
Sugerencias prácticas para hacer actividades en el ámbito Físico, Psíquico y Social-Relacional
A nivel Físico-Biológico, además de los cuidados médicos y de salud imprescindibles, es necesario realizar ejercicio físico diario de cualquier tipo: aeróbico, pasear, andar en bicicleta, correr, bailar, andar, hacer taichi, yoga, gimnasia de mantenimiento, algún deporte. Tener en cuenta también una alimentación equilibrada, evitando la obesidad y un descanso reparador. Conviene dormir ocho horas diarias.
- Con la edad tendemos a movernos menos, a disminuir la autonomía, la masa muscular se aminora, se pierde fuerza, la motricidad es más lenta, lo que origina enfermedades, problemas de metabolismo, dependencia, inmovilidad y menos años de vida.
- Se recomienda realizar una actividad moderada o ligera que oscile alrededor de 2,5 horas diarias o 10.000 pasos. El ejercicio debe estar adaptado a cada uno para lograr beneficios físicos, cognitivos y sociales, sobre todo si se realiza en grupo.
- El ejercicio ayuda a mejorar el sistema inmunitario, circulatorio, respiratorio, musculoesquelético, neurológico y endocrino, a enfermar menos, a tener menos dolor. Como norma general no se debe de estar más de 2 horas sentado.
- La actividad física debe ser sistemática, progresiva, consciente, voluntaria, divertida y ejercitar todas las partes del cuerpo. Cada persona precisa actividades y ejercicios adecuados a su edad de modo que mantenga su capacidad funcional en condiciones óptimas.
- Ayuda a mejorar el desarrollo Cognitivo y/o Intelectual contribuye a mantener y/o facilitar la memoria, la atención, el aprendizaje, el lenguaje y la agilidad mental; lo que beneficia retardar la demencia y otros deterioros cognitivos. Facilita a la vez la autoestima, el sentirnos útiles, lo que nos produce satisfacción, ánimo, alegría.
- Incrementa la evolución Socio-Afectivo-Emocional, las relaciones y actividades con otras personas mejoran nuestra sociabilidad. Nuestra vida se enriquece con los demás.
- No se debe olvidar la importancia que la Música representa como terapia, emoción, alegría, recuerdos, sentimientos, felicidad y repercute positivamente en todos los aspectos de la persona: en lo orgánico, mental, social e incluso espiritual.
En el aspecto Psíquico, se refiere a todo lo relacionado con el área Cognitivo-Mental. Hay que estimular la inteligencia, el razonamiento lógico, la memoria a corto plazo, el lenguaje (oral o escrito), la atención, el aprendizaje y las distintas percepciones multisensoriales (audición, visión, olfato, tacto, gusto).
- Realizar ejercicios de lectura rápida de libros, periódicos y revistas. Tareas de operaciones de cálculo, escribir, hacer crucigramas, sudokus, puzles, resolver adivinanzas, sopa de letras, recordar poesías, refranes y textos; completar palabras, pasatiempos, aprender idiomas, usar las nuevas tecnologías (TIC).
Las (TIC) están ayudando mucho por la aportación que nos ofrece la información de Internet, el teléfono inteligente, la Tablet, el ordenador, los videojuegos, etc., contribuyendo a potenciar el desarrollo personal e incluso social, favoreciendo la realización de experiencias lúdicas, creativas, culturales, solidarias, etc. - El área afectivo-emocional es de suma importancia, sentirse querido y aceptado por uno mismo y por los demás. Es preciso la autorregulación, el control emocional y evitar el estrés, lo que reducen el riesgo de mortalidad. El afecto positivo influye en la salud física y psíquica, nos protege de la fragilidad y discapacidad, nos ayuda a mejorar los problemas o enfermedades, nos hacer vivir más y mejor.
- Muy importante es la relación con los nietos, éstos reciben ayuda y experiencia, se les proporciona más tiempo, afecto, disposición, economía, valores y sabiduría. La relación intergeneracional es necesaria para abuelos y nietos.
En el ámbito Socio-Relacional fomentar las relaciones familiares, los amigos, los vecinos, los grupos distintos de actividades que elegimos. Todo ello produce un bienestar personal indiscutible. Ser generosos, tratar de hacer felices a los que amamos.
- La Participación Ciudadana solidaria nos aportará mucho, si actuamos en actividades de instituciones, asociaciones o fundaciones (sociales, culturales, políticas, lúdicas, deportivas), movimientos ciudadanos, vecinales, ONG.
Realizar acciones de Voluntariado produce beneficios tanto al que da como al que recibe. Hay que implicarse en lo social. Apuntarse en actividades novedosas, de ocio activo. Todas ellas ayudan a mantener, e incluso desarrollar las capacidades físicas, mentales y sociales; contribuyendo a conseguir autoestima, confianza, compromiso y utilidad social y participativa.
Ejercicio Físico y Envejecimiento Activo y Satisfactorio
- La actividad física aminora algunas enfermedades, ayuda a envejecer de forma saludable, mejora el estado de ánimo, evita la discapacidad, desarrolla más y mejor la sociabilidad y la convivencia, lo que repercute en sentirnos mejor, ser más felices.
- Favorece aspectos esenciales del cuerpo, de la mente y de la relación social. Nos hace estar en forma, más contentos, enriquece incluso el ámbito afectivo-emocional, e incrementa una mayor concentración intelectual. Si se realiza con otras personas aumenta las interrelaciones sociales.
- Colabora a cambiar la imagen corporal, intensifica la actividad cerebral, la memoria a largo plazo, el aprendizaje y las capacidades cognitivas: atención, concentración, razonamiento, lenguaje, e incluso la inteligencia.
- Nos refuerza para protegernos contra el estrés, éste produce tensión psicológica y peligros constantes: ansiedad, preocupación y hasta enfermedades físicas y mentales.
- Se recomienda mantener buena forma física. No fumar, no beber, no ingerir drogas y tomar los menos medicamentos posibles. Tener una dieta adecuada y equilibrada.
- La triangulación mente, cuerpo y espíritu es necesaria, o lo que es lo mismo la unión de lo biológico, psicológico y social. Respecto a la espiritualidad, las prácticas de meditación, relajación, taichí, yoga, mindfulness (atención plena), etc., sirven para concentrarse mejor y mejoran la atención, la observación, el reposo, la tranquilidad y el bienestar.
- El ejercicio físico retrasa el envejecimiento. Estar sentado no ayuda a vivir mejor.
- Se debe buscar un Equilibrio entre: cuerpo-cerebro y mente o también entre salud, nutrición y deporte.
Aunque el envejecimiento activo tiene un componente personal indiscutible, no hay que olvidar la aportación que la sociedad, en su máxima extensión, debe contribuir para fomentarlo. Si cumplimos parte de lo señalado en el texto, estaremos evitando la temida Soledad no Deseada.