En línea con nuestro proyecto sobre Jubilación Activa, adjuntamos el enlace a un video sobre “Reconocimiento a personas voluntarias” que publicó la Agencia del Voluntariado hace un tiempo. No tiene desperdicio. Los mensajes nos resultan conocidos, hablan de experiencias que nos resultan familiares. Hay quien considera la vida del voluntario como una “droga buena”. Para otros es un dar y recibir, pero con un saldo importante a favor de lo que se recibe. Algunos reconocen que se puede parecer un bicho raro, pero, matiza, hacemos los que nos gusta.
Se invoca que desgraciadamente tiene que haber voluntarios, seguramente porque se reclama de otros sectores, por ejemplo, la Administración, que haga innecesaria su existencia. Pero posiblemente es más sano, para la propia sociedad, que el voluntariado ocupe el hueco que dejan por un lado la iniciativa privada, por falta de perspectivas de rentabilidad; por otro, la Administración Pública, por su lógica “pesadez” burocrática, inherente a los controles que su actividad debe tener; y, por la escasez de recursos. Por eso se le conoce, al mundo de las Asociaciones en general, muchas basadas en el Voluntariado, como el tercer sector. Sector que cohesiona la sociedad, estrechando las relaciones entre los dos primeros sectores, a veces, siendo la vanguardia de ellos. También ofrece soluciones reales a problemas reales y proporciona a los voluntarios la posibilidad de realizarse, dar un sentido adicional a su vida y descubrir vocaciones que sólo tienen cabida en este tercer sector. No nos perdamos el video en el que, por cierto, participa nuestro presidente.